Fines de abril y principios de mayo son el tiempo de la vendimia en el Valle de Trevelin. Todo el esfuerzo del año, las labores en el campo, el cuidado de la viña se corona con la recolección de los racimos que nos darán, nuevamente, esos vinos que nos han valido un  lugar cada vez más notorio en el mapa vitivinícola argentino.

Si en 2020 la vendimia en una pandemia que recién comenzaba fue un desafío, la vendimia 2021 nos permitió recolectar los frutos del año más impensado. Hubo un momento en el camino en el que solo teníamos que ocuparnos de las plantas, de acompañarlas, porque no había otras actividades posibles. Pero luego, cuando llegó el verano, los viñedos de Trevelin explotaron de visitantes  y protocolos que lograron convivir durante varios meses.
Quizás la energía y las buenas vibras de las cientos de personas que recorrieron las viñas, que escucharon las historias de los bodegueros y bodegueras hayan colaborado también para que las uvas de esta vendimia hayan sido excepcionales.

Para contar las sensaciones de este año tan especial, qué mejor que la palabra de los propios protagonistas.

Casa Yagüe (Patricia Ferrari, fundadora y propietaria)
Nuestras imágenes de la vendimia 2021 reflejan una temporada que será recordada por los grandes desafíos que hemos vivido; desafíos que aún nos toca transitar.  A pesar de ello, el clima nos regaló un verano muy cálido, con muchos días de sol y con pocas heladas. Eso no permitió obtener una muy buena calidad de fruta y pudimos cosechar la uva con la madurez deseada.
Sin duda, recordaremos esta vendimia cómo un reencuentro con amigos tanto aquí en Casa Yagüe, como en lo que repecta a los aficionados al vino y a quienes no unen vínculos virtuales tan presentes hoy.
Aunque es muy pronto para pensar en los vinos 2021, soñamos con que cuando estén listos representen la unión y los abrazos. Seguramente también encontraremos austeridad y complejidad, una suerte de memoria de un año que marcó a toda la humanidad.

Contra Corriente (Sofía Elena, winemaker)
Lo primero que hay que decir es que en esta vendimia, el clima nos acompañó y nos benefició. No solo en la evolución de las plantas, sino que durante todo el verano pudimos disfrutar de muchos días de sol y de calor que también ayudaron al turismo y  a que muchas personas conocieran la bodega. Ese calor y las pocas heladas hicieron que las plantas se desarrollaran en gran forma. Porque aunque utilicemos sistemas anti heladas, después de esos eventos la planta tiene que hacer un gran esfuerzo para retomar su crecimiento. Estas condiciones nos permitieron obtener una madurez muy interesante, con una concentración que le va a venir muy bien a los vinos: normalmente obtenemos vinos de bajo grado alcohólico, entre 11 y 12 volúmenes de alcohol, pero este año vamos a tener vinos con otro peso.
Una mención importante se merecen los muchos amigos de la zona que participaron de la vendimia, con quienes compartimos este momento clave en el año. Ahora, nuestros vinos ya están desarrollándose, están fermentando los chardonnay y los riesling; y también  estamos por embotellar la cosecha 2020 que estaba criándose en barricas.

Viñas del Nant y Fall (Sergio Rodríguez, fundador y propietario)
Este año hemos tenido niveles históricos de azúcar y la fruta se vio con una intensidad de color y una expresión aromática que nos hacen tener grandes expectativas. Desde nuestra primera vendimia hace seis años, nunca habíamos tenido uvas con estas características así que creemos que será una añada realmente excepcional.
En este 2021 pudimos vivir la vendimia como lo que es, una fiesta con amigos, con familia, con vecinos, con turistas, solo que esta fiesta que singifica el recolectar los frutos de la tierra la hemos exteriorizado como una reflexión. No hemos hechos grandes eventos ni reuniones multitudinarias, pero sí hemos compartido el trabajo y la alegría que nos genera la vendimia como una reflexión.
Y este año, además, hemos hecho nuestra primera cosecha de sauvingon blanc que para nosotros es una novedad y que esperamos  ver cómo se expresa en este  punto del Valle de Trevelin.